Luis Miguel Domínguez afirma que el lobo sufre "racismo zoológico".

“El único problema que tiene el lobo es el odio que se le tiene, tan arcaico como inútil, y vinculado con un miedo ancestral”, con estas palabras ha iniciado su intervención el naturalista Luis Miguel Domínguez, que ha mantenido un encuentro con los medios de comunicación, horas antes de participar en una charla que ha sido organizada por el Servicio de Colecciones Zoológicas de la Universidad de León (CZULE), y que tendrá lugar hoy a las 19:30 horas el Salón de Grados de la Facultad de Ciencias Biológicas y Ambientales.

En su opinión, “el lobo soporta racismo zoológico, como ninguna otra especie”, lo que hace que sufra una persecución institucional difícil de entender. “Todo lo que ocurre alrededor del lobo, -afirmó-, está inflado”,- y añadió que “las muertes que provoca en la cabaña ganadera en toda España no llegan al 3%”.

Luis Miguel, que ha reclamado la defensa y protección a ultranza del lobo ibérico, ha reconocido que hay daños en la ganadería, pero ha explicado que son anecdóticos y puntuales, y que en ningún pueden justificar “declaraciones de guerra que piden su extinción”.

Finalmente, el naturalista, que ha comparecido ante la prensa en compañía del Antonio Laborda, Director del Servicio de Colecciones Zoológicas de la ULE (CZULE), se ha mostrado orgulloso por el amplio seguimiento de la campaña de recogida de firmas que se ha llevado a cabo desde la plataforma de activismo social www.change.org , y ha defendido un “contrato territorial” que permita la convivencia de lobos y ganaderos. “La conservación, -concluyó-, debe ir vinculada a un desarrollo rural sostenible respetuoso con el medio ambiente, y capaz de generar riqueza”.

(Fotografía: Luis Miguel Domínguez, y el Director del CZULE, Antonio Laborda)